La Parroquia de Santa Francesca Cabrini es una de las cuatro parroquias donde hace más de 50 años se inició la experiencia del Camino Neocatecumenal gracias a la generosidad y valentía de los padres maristas que acogieron a Kiko Argüello y Carmen Hernández, dos españoles aún desconocidos.

La generosidad (y la audacia profética) del entonces párroco, padre Pietro Necci, se vio recompensada con la presencia de 32 comunidades, cientos de familias, jóvenes y niños. Los frutos son innumerables: familias abiertas a la vida, vocaciones sacerdotales, vocaciones religiosas, hermanos y hermanas itinerantes, numerosas familias en misión e itinerantes esparcidos por el mundo, numerosos agentes pastorales (diáconos, acólitos, catequistas de iniciación cristiana, voluntarios para diversos servicios). .

Hoy, en tiempos de crisis y de fieles que huyen de las parroquias, Santa Francesca Cabrini es una parroquia viva donde el Espíritu Santo actúa de manera palpable en la vida de los fieles a través de la experiencia de la "pequeña comunidad cristiana" que ofrece a los jóvenes. y adultos, “formación permanente en la fe”.

Aquí mismo San Juan Pablo II, en 1983, decía: “Debo señalar aquí, en la parroquia de Santa Francesca Cabrini, que vuestro movimiento (edición de viaje)  aquí constituye una levadura, una levadura que debe impregnar a las masas y al mundo de los cristianos en general: no todos son conscientes, no todos lo hacen; sois fermento aquí, debéis impregnar esta comunidad, que son unas veinte mil personas, impregnarla de una nueva conciencia de la dignidad humana implicada en la realidad de la filiación divina. ¡Lo haces bien, muy bien! ¡Canta, canta! Porque el canto demuestra siempre la alegría, este descubrimiento de la realidad divina y humana."

Para los Peregrinos será un regalo admirar el fresco de la Capilla y el icono de la Ascensión del Señor al Cielo, situado en el ábside de la Iglesia, pintados por Kiko Arguello en 1984 y 1992 respectivamente, y tener un momento de oración.

Los hermanos -algunos de la primera hora- ayudarán a los peregrinos en la visita, dando un testimonio de fe y anclándolo a la historia vivida en este lugar.